Este cuerpo extraño puede ser una parte de metal, vidrio, plástico o cualquier otro material que haya penetrado accidentalmente en la órbita.
Esta cirugía es esencial para prevenir infecciones y otras complicaciones que pueden surgir como resultado de la presencia del cuerpo extraño. Generalmente, se realiza bajo anestesia general para asegurar la comodidad y seguridad del paciente durante el procedimiento.
La extracción del cuerpo extraño puede implicar diversas técnicas, dependiendo del tipo y la ubicación del cuerpo extraño. En algunos casos, se puede acceder a la órbita a través del exterior de la piel y los tejidos circundantes mediante una incisión quirúrgica. En otros casos, se puede utilizar el abordaje endoscópico para acceder a la órbita a través de pequeñas incisiones e instrumentos especializados.