Los tumores de iris y cuerpo ciliar, también conocidos como melanoma uveal, son un tipo de cáncer que se desarrolla en la úvea, la capa pigmentada del ojo que contiene el iris, el cuerpo ciliar y la coroides. Estas estructuras son esenciales para el buen funcionamiento del ojo, ya que regulan la cantidad de luz que entra al ojo, controlan la forma del cristalino y producen el humor acuoso.

La causa exacta de los tumores de iris y cuerpo ciliar se desconoce, pero varios factores pueden aumentar el riesgo de desarrollarlos, entre ellos:

  • Genética: Si tienes familiares con melanoma uveal, tienes un mayor riesgo de desarrollarlo.
  • Exposición al sol: La radiación ultravioleta (UV) del sol puede dañar el ADN de las células de la úvea y aumentar el riesgo de cáncer.
  • Edad: El riesgo de melanoma uveal aumenta con la edad.
  • Color de los ojos: Las personas con ojos azules o claros tienen un mayor riesgo de melanoma uveal que las personas con ojos marrones.
  • Sexo: Los hombres tienen un poco más de riesgo de desarrollar melanoma uveal que las mujeres.

Síntomas de los tumores de iris y cuerpo ciliar:

Estos tumores a menudo no presentan síntomas en sus primeras etapas. Sin embargo, a medida que el tumor crece, pueden aparecer los siguientes síntomas:

  • Visión borrosa o distorsionada
  • Moscas volantes o manchas en la visión
  • Dolor ocular
  • Enrojecimiento del ojo
  • Cambios en la forma de la pupila
  • Pérdida de visión en un campo visual

Si experimentas alguno de los síntomas descritos anteriormente, es importante que consultes a un oftalmólogo de manera inmediata. El especialista realizará un examen completo de los ojos y puede solicitar pruebas de imagen, como una ecografía ocular o una resonancia magnética (RM), para obtener una imagen más detallada del tumor.

Tratamiento de los tumores de iris y cuerpo ciliar:

El tratamiento de estos tumores dependerá del tamaño, la ubicación y el estadio del tumor. Las opciones de tratamiento pueden incluir:

  • Cirugía: La cirugía para extirpar el tumor es el tratamiento más común.
  • Radioterapia: La radiación se utiliza para destruir las células tumorales.
  • Fototerapia dinámica: Este tratamiento utiliza un medicamento fotosensible y luz láser para destruir las células tumorales.
  • Terapia con dianas moleculares: Estos medicamentos se dirigen a anomalías moleculares específicas presentes en las células tumorales.

El pronóstico dependerá de varios factores, como el tamaño, la ubicación, el estadio del tumor y la respuesta al tratamiento. En general, el pronóstico de estos tumores detectados en estadios tempranos es bueno. Sin embargo, los tumores en estadios más avanzados pueden ser más difíciles de tratar y el pronóstico puede ser peor.