Los tumores intraoculares son crecimientos anormales de tejido que se desarrollan dentro del ojo, afectando la retina, la coroides u otras estructuras oculares. Estos tumores pueden ser benignos (no cancerosos) o malignos (cancerosos) y pueden afectar a personas de todas las edades, aunque son más frecuentes en adultos.
Tipos de tumor intraocular:
- Melanoma uveal: es el más común y se desarrolla en la capa media del ojo (coroides). Puede causar síntomas como visión borrosa, pérdida de visión periférica y manchas oscuras en el campo visual.
- Retinoblastoma: un tumor maligno que afecta principalmente a los niños y se desarrolla a partir de las células de la retina. Puede provocar una pupila blanca anormal (leucocoria), estrabismo y pérdida de visión.
- Nevus coroideos: tumores benignos que se forman en la capa media del ojo. Generalmente no causan problemas visuales, pero en algunos casos pueden crecer y afectar la visión.
- Otros tumores: otros tipos menos comunes de tumores intraoculares incluyen hemangiomas, osteomas y linfomas.
Síntomas del tumor intraocular:
Los síntomas de los tumores intraoculares pueden variar dependiendo del tipo, el tamaño y la ubicación del tumor. Así pues, algunos síntomas generales incluyen:
- Visión borrosa o distorsionada
- Pérdida de visión periférica
- Manchas oscuras o puntos negros en el campo visual
- Visión nocturna deficiente
- Dolor ocular
- Enrojecimiento o inflamación ocular
- Pupila blanca anormal (en el caso del retinoblastoma)
Diagnóstico de los tumores intraoculares:
Para realizar un buen diagnóstico de los tumores intraoculares se lleva a cabo un examen oftalmológico completo, incluyendo el examen de la retina con dilatación de pupilas. En algunos casos, se pueden realizar pruebas de imagen adicionales como una ecografía ocular, una angiografía con fluoresceína o una tomografía de coherencia óptica (OCT). Si hay sospecha de cáncer, también se puede realizar una biopsia ocular para confirmar el diagnóstico.