El glaucoma de ángulo cerrado, también conocido como glaucoma agudo, es una enfermedad ocular que puede provocar una pérdida de visión rápida y permanente si no se trata con urgencia. Se produce cuando la presión intraocular aumenta de manera súbita debido a una obstrucción del ángulo de la cámara anterior del ojo, que es el espacio donde se drena el humor acuoso.

Factores de riesgo de esta patología:

  • Tener un ángulo de la cámara anterior estrecho desde el nacimiento.
  • Miopía.
  • Antecedentes familiares de glaucoma de ángulo cerrado.
  • Ciertos medicamentos: Como anticolinérgicos y esteroides.
  • Dilatación pupilar: Como la que se produce en algunos exámenes oculares o con ciertos medicamentos.

Sintomatología:

Los síntomas del glaucoma de ángulo cerrado aparecen de manera repentina y pueden incluir:

  • Dolor ocular intenso.
  • Visión borrosa o nublada.
  • Halos o círculos de colores alrededor de las luces.
  • Enrojecimiento del ojo.
  • Náuseas y vómitos.
  • Dolor de cabeza.
  • Sensibilidad a la luz.

Diagnóstico del glaucoma de ángulo cerrado:

El diagnóstico del glaucoma de ángulo cerrado se realiza a través de un examen ocular completo realizado por un oftalmólogo. El examen puede incluir:

  • Medición de la presión intraocular.
  • Examen del nervio óptico.
  • Campimetría: prueba para evaluar el campo visual.
  • Gonioscopía: para evaluar el ángulo de la cámara anterior del ojo.

Tratamiento para este tipo de glaucoma:

Es una patología que se considera una emergencia médica y requiere tratamiento inmediato para reducir la presión intraocular y prevenir daños permanentes al nervio óptico. El tratamiento inicial puede incluir:

  • Gotas oftálmicas: Para dilatar la pupila y abrir el ángulo de la cámara anterior.
  • Medicamentos por vía oral: Para reducir la producción de humor acuoso y disminuir la presión intraocular.
  • Tratamiento láser: Para crear una nueva vía de drenaje para el humor acuoso.
  • Cirugía: En casos graves, puede ser necesaria la cirugía para crear una nueva vía de drenaje para el humor acuoso.

Prevención

Si tiene riesgo, su oftalmólogo puede recomendar tratamiento preventivo. Esto puede incluir:

  • Iridotomía láser: Un procedimiento que crea una pequeña abertura en el iris para permitir el drenaje del humor acuoso.
  • Medicamentos: Para reducir el riesgo de un ataque.